Zaragoza Información
Zaragoza fue la capital del Reino de Aragón durante la Edad Media posee un rico patrimonio monumental en el que se entremezclan las influencias de las diversas culturas que la habitaron. Calles medievales y grandes avenidas "afrancesadas" componen una ciudad de atmósfera cosmopolita y abierta. Una riqueza cultural que se transforma en suculentas recetas al hablar de gastronomía. Zaragoza es, además, un excelente punto de partida para visitar parajes como el Parque Natural del Moncayo, o recorres villas históricas como Ejea de los Caballeros o Sos del Rey Católico.
Esta muestra del barroco aragonés se encuentra entre las murallas romanas, y el Ayuntamiento y la Lonja de los Mercaderes. La lonja es una de las construcciones civiles más importantes del Aragón del siglo XVI, donde podemos apreciar esbeltas pilastras y bóvedas de crucería. Además de sus funciones museísticas, acoge restos del Foro romano. Al lado se alza la espigada torre de La Seo o Catedral de San Salvador. Construida sobre la Mezquita Mayor, el Muro de la Parroquieta es una de las obras cumbres del mudéjar zaragozano. Un retablo del siglo XVI, realizado en alabastro, es el punto clave en su interior.
En este entorno encontramos también el Arco del Deán y el Palacio de Armijo, sede del Justicia de Aragón, institución aragonesa pionera en la defensa de los derechos de los ciudadanos desde la Edad Media. También merecen una visita palacios renacentistas como el de los Pardo, hoy Museo Camón Aznar, y el de Montemuzo, sede de la Hemeroteca y Archivo Municipal; además de los de Donlope y el de los Marqueses de Huarte. En la calle Mayor también hay que visitar la iglesia de La Magdalena, cuya torre mudéjar (s. XVI) es una de las más representativas de la ciudad.
Otra área de interés es la que se despliega alrededor de las murallas romanas. Frente a uno de los siete puentes que atraviesan el Ebro, encontramos el Torreón de Zuda, un antiguo palacio árabe. Contrasta en este punto la arquitectura modernista del cercano Mercado Central. La visita puede continuar en el museo del escultor aragonés Pablo Gargallo, el Torreón Fortea y la iglesia de San Pablo.
Para coger el ritmo de esta gran ciudad, iremos hasta la Aljafería por la calle Conde de Aranda que discurre paralela al Ebro. Así conoceremos la arquitectura modernista de Zaragoza ejemplificada en la Casa Molins y el Casino Mercantil. Y, ya casi llegando a nuestra meta, el monumento a Agustina de Aragón, de Mariano Benlliure, emplazado en uno de los puntos clave de la defensa de Zaragoza durante la Guerra de la Independencia. El palacio de la Aljafería, actual sede de las Cortes aragonesas, fue construido por los árabes en el siglo XI como lugar de recreo y está considerado como el eslabón artístico entre la Mezquita de Córdoba y la Alhambra de Granada.
Grandes avenidas "afrancesadas" nos llevarán al Paseo de la Independencia y la Plaza de Aragón. Por estos aledaños podemos visitar la Basílica de Santa Engracia, Correos, el Patio de la Infanta y el Museo Paleontológico. En pocos metros tendremos la oportunidad de contemplar bellas muestras renacentistas, el estilo neomudéjar, pinturas de Goya y una interesante colección museística en la antigua Facultad de Medicina y Ciencias, respectivamente.
A pocas calles de distancia quedan la Plaza de los Sitios, que alberga un interesante monumento modernista; y el Museo de Arqueología y Bellas Artes, donde también conoceremos otras obras de Goya.
Fuente:"www.spain.info"